Nuevamente es septiembre…
El colibrí ha vuelto a tu jardín
con sus pétalos blancos
por esa eterna magia del amor.
Quiere decirte: ¡Vivo!
en el aroma de las primeras horas
en el dorado néctar de tus labios
en la ansiada ternura de tu piel
¿Qué sería del amor sin primaveras?
¿Qué sería de la belleza sin la flor?