domingo, 20 de diciembre de 2015

Vidrieras






                                                no vayas tras el áureo gorjeo del canario
él es eterno preso  y con su canto
elogia a su propio carcelero
que lo priva del vuelo y la belleza

en tu humano destino
el mundo de consumo en que transitas
te muestra una vidriera
y en su reino
un augurio de paz y de alegría
que complace tu anhelo presumido
de arribar a sus caras fantasías

a veces el amor no lo es sincero
en su engañoso marketing propone
un romance de goces y misterios

para que en tus deseos
                                                               de  elevados  ensueños        
queden tus alas  presas y sin vuelos


viernes, 4 de diciembre de 2015

Mi corazón reclama






Tus ojos son mis ojos
(en ellos me reflejo).
Tus besos inoculan
la savia que extasía
y al fuego de los labios
explota la piñata
de nuestras ilusiones
catapultando sueños.
En tus manos comprendo
la sensación de un aura
que mi piel necesita.
Tus senos son la fuente
donde inclino mi boca
es busca de ternura.
Y es tu floral corola
quien provoca mis celos
al ver los picaflores
pretendiendo tu néctar.
 
Mi corazón reclama
tu amor a cada instante.


miércoles, 2 de diciembre de 2015

Recordando...







 
Ya viejo, encanecido,
ensillas el amargo
en los días temprano
y en sorbos de silencio
te escapas para el campo
recordando tu quinta,
recordando tus flores,
recordando tus frutos...
y remontas en vuelo.

Aflojando las riendas
le permitiste el paso
 a tu viejo tobiano,
el ala del acero
se introdujo en el humus
para formar el surco
y los gruesos terrones
se fueron escupiendo
dejando la hondonada.
El olor a la tierra
te llegó a la profundo
y pies trastabillantes
en terreno agrietado
quedaron percudidos,
mientras sudosa frente
con el volátil polvo
embarraba tu cara.

Fue más tarde la rastra
quien alisaba el campo
demoliendo el cascote
y llevando entre dientes
la vencida maleza.
Y así se unió a tu mano
el brazo de la azada
para hendirse en el suelo.

Echaste la semilla
y gracias de la lluvia
dieron el nuevo brote
que se fue haciendo planta
marcando la besana.
Y tuviste tus tardes
de quinta florecida,
y maduró tu fruto
con soles de los días,
y recibiste el premio,
gozaste tu comida,
viendo como tu niño 
a tu lado crecía.

Pero vino el ocaso 
y esa tierra no daba 
lo que el mundo exigía.
Entonces emigraste
a las grandes ciudades,
inhalaste los humos,
anduviste con prisa,
te aturdieron los ruidos
y perdiste la risa. 

Y hoy, viejo, encanecido,
ensillas el amargo
en los días temprano
y en sorbos de silencio
te escapas para el campo
recordando tu quinta
recordando tus flores,
recordando tus frutos,
hasta que pierdes vuelo
y encuentras el cemento
que ha cubierto tu tierra
que ha ocultado tu cielo.

Del libro Estampas de un tiempo Nuevo (1994)

Rocío

  El rocío es el beso sensual de la noche para que las flores despierten en la aurora con el pistilo    abierto hacia el estambre y en su or...