lunes, 3 de noviembre de 2014

Desencanto






¿Para qué he de vivir sin alegrías
en un mundo servil y genuflexo
que idolatra princesas y reinados?

Yo no entiendo un poeta que no cuente
la realidad del tiempo que transita.
Valen ,sí, el amor, la dulzura…
bellezas de mujeres y de flores;
pero la contracara ha de mostrarse
si llevo la virtud como un ejemplo,
pues también es poesía
aunque la niegue cierta intolerancia
de insanas mezquindades.
Si ataco a la usura, la soberbia,
la vana caridad y la riqueza,
o aquellas fundaciones, ideadas
con la evasión de impuestos;
o a los que día a día roban
dignidad y sonrisa de los pueblos,
aparecen censores de mis versos.

¿Vale un amigo acaso, contenido
por vacías e hipócritas palabras?
¿No es mejor andar con desencantos,
en cierta soledad
pero con la alegría de la palabra digna?

Rocío

  El rocío es el beso sensual de la noche para que las flores despierten en la aurora con el pistilo    abierto hacia el estambre y en su or...